Más vale prevenir… que llorar: Un reto para el siglo XXI

La medicina se ha definido como el arte y la ciencia de prevenir y tratar las enfermedades. Pero, no siempre es simple identificar situaciones de riesgo.Ningún profesional puede evitar, al llegar a cierta etapa de su vida, la obligación de contar a los otros lo que le ha enseñado su experiencia. La temática médica, en sí, no tiene interés salvo en raras excepciones. En el sufrir, como el pecar, lo que da interés, son las eventualidades. El cáncer de ovario representa en torno a un 5% de todas las tumoraciones malignas en las chicas y es la sexta causa más usual de muerte por cáncer entre las mismas. ASACO (Asociación de Afectados por Cáncer de Ovario) es una encomiable y valiente asociación, que tiene un objetivo primordial que compartimos plenamente: PREVENIR ANTES QUE LLORAR.El cáncer de ovario es un tumor con instinto asesino, que irrumpe, sin previo aviso, en la vida de una chica con nocturnidad y alevosía. Hasta hace pocos años, el «asesino» llevaba las de ganar. Siempre, o casi siempre, se diagnosticaba en un estadio avanzado. Con los avances científicos de los últimos años, me refiero a medios auxiliares de diagnóstico y progresos terapéuticos, se alumbra la posibilidad de cambiar las tornas y tal vez, en un futuro no muy lejano, el «tumor asesino» pudiera ser detenido a tiempo, juzgado y ejecutado.