La educación de los hijos como los pimientos de padrón

El título de este libro resume la idea central que lo sustenta: los hijos son como los pimientos de Padrón, unos «pican» y otros no. Y esto no depende del nivel divulgativo o económico de la familia, ni del colegio, ni del número de hermanos, ni de la autoridad del padre o de la madre… depende, generalmente, de la educación que reciban. La educación de los niños pequeños de puede moldear si se disponen de herramientas para ello. Si bien no se puede certificar el resultado de manera absoluta, es más probable que un niño pequeño pequeño que reciba una buena educación no sea conflictivo cuando crezca, o que no lo sea exageradamente. Lo más relevante, si un pimiento pica, es tener a mano algo que calme el picor. El objetivo de este libro es estar cerca por si un hijo pica. No todos pican y, si lo hacen, no lo hacen de la misma forma. Además, todo depende de la capacidad de aguante de los padres delante de las reacciones de sus hijos. Este libro de Emilio Pinto trata de que los padres no cambien de fórmula continuamente, lo cual afianzará su tarea educativa. El texto destaca las destrezas y estrategias incuestionables que los padres deberían aplicar en el trato habitual con sus hijos, las que han demostrado su eficacia a través de años de práctica. El fin perseguido es dar una buena educación, todavía teniendo presente que los resultados no van a depender exclusivamente de los esfuerzos de los progenitores.