El príncipe azul que dio calabazas a la princesa que creía en los cuentos de had

Había una vez un Príncipe Azul que estaba hasta las narices de besar a damiselas que jamás despertaban de su letargo existencial, y que solo sabían echar la culpa de su desastre vital y se empeñaban en hacer abonar sus sueños rotos a los hombres. Un estupendo día, nuestro Príncipe Azul se encontró con su Hada Madrina, quien le enseñó a redefinir su relación con las chicas y a desembarazarse de todas las ideas caducas y de las obligaciones que le eran ajenas y ni siquiera había escogido. Ésta es la historia de muchísimos hombres buenos, que descubren que les han contado ficticios cuentos de hadas y resulta que sí tienen la capacidad de querer.