El pintor de primaveras

Imaginemos un ser limpio, de alma y mente, que abandonando su burbuja vital decide dar el paso de tratar de integrarse en una sociedad viciada, egoísta y corrupta. Los integrantes de la comunidad no pueden dejar que el ejemplo cunda y han de contaminarlo a toda costa. A su favor lo tienen todo, los medios, el dinero, la comunicación, a pesar de ello, no cuentan con una poderosa arma de nuestro héroe. El Pintor no solamente crea belleza, tiene la capacidad de trasmitir, de tal manera que al observar uno de sus cuadros, ciertos sentimientos emanan de él, enredándose en el espíritu, transformando tú mismo interior. Esa especie de magia asusta todavía más y todas las fuerzas del averno unirán sus intereses con el fin de que eso no prospere. En esta lucha desigual los actores irán descubriendo sus cartas y mostrando todas las trampas que son capaces de urdir con tal de conseguir un momento de gloria.