Conmigo no podéis

La intolerancia. Pariente cercano de la ignorancia, del temor, hija muy querida del egoísmo. La que empuja a despreciar e infravalorar al que es diferente. La que tantas guerras y tantos odios ha cosechado desde siempre. Colega de viaje de los dos protagonistas de esta historia, Alber y Pedro, en cuyos huesos van a sentir su fría y dolorosa dentellada, de la mano del bullying, del fanatismo religioso fundamentalista, desembocando tantas veces en el negro y triste mar de la soledad. Pero el amor, como siempre, será la mejor medicina en contra de esta peste silenciosa, borrando de las vidas de los dos protagonistas las amarguras y sinsabores que tan indeseable colega les ha provocado. Amor que será la fuerza que les haga gritar con valentía: ?Conmigo no podéis?.